Regreso a la Realidad

Ayer tuve una posada en mi casa, fueron mi jefe, mis compañeros de oficina, y los chicos de servicio social, en total éramos como 12 personas, nos pusimos de acuerdo porque la crisis nos pega a todos, por eso lo hicimos en casa, el menú fue el siguiente: teníamos botana (papitas, chicharrones, cacahuates, nueces y churritos), había rajas con queso y crema, rajas naturales con champiñones (light), discada, puerco en salsa verde, chicharrón con huevo, picadillo, picadillo texmex, deshebrada, pastel volteado de piña, hojarascas, cerveza, refrescos y cientos de tortillas de harina.

La verdad nos la pasamos muy padre, comimos sólo una vez, a lo que me refiero es que a pesar de estar un rato extenso no fue de comida, luego recaliento cena, pero finalmente comí, tenia opciones, pero comí, afortunadamente no caí en el pastel ni en los dulces, pero pasamos una tarde-noche muy divertida.
El problema fue al final, cuando repartí la comida, yo quería que toda se acabara pero no fue así, quedo muuucha en mi casa, por más que repartí me quede con dos sartenes de múltiples guisos, parte del pastel, parte de la botana, y el resto de las tortillas de harina.

Como a eso de las nueve de la noche se termino la fiesta que empezamos desde temprano, me quede en mi casa todavía riéndome de todo lo que jugamos, y finalmente empecé a recoger y ordenar mi casita, pero había comida, no sé si me entienden, pero cuando uno tiene este problema de la obesidad, no sabes cuándo parar, la tentación es demasiada y dices aaa un taquito más, ándale pa´ que se acabe…

Esta mañana tuve mi regreso a la realidad, seguir con alimentos sanos y bajos en carbohidratos, la decisión fue muy difícil, esta mañana preparé el desayuno para mí esposo, claro quería más taquitos del recalentado que quedo en casa, total! Mañana tengo una posada, síguele Celestina, y saben qué? No pude, empaquete la botana para traerla a la oficina para mis compañeros y los niños del servicio social, envolví parte del pastel para la oficina, y solo deje un pedazo para Oliver para que merendara por la tarde.

Saque una vasija pequeña y calenté un poco de uno de los guisos y le hice sus tacos de harina a Oliver que tanto quería, y yo saque jamón de pavo y los rellene de queso panela con champiñones, pensando, hoy no tienes evento ni compromiso, ni pretexto ni nada, mañana al medio día es la posada de tu facultad, entonces comerás, tomarás, brindarás y pasarás una tarde noche agradable como la de ayer, todo el día de hoy, y mañana cuando desayunes comerás lo que te recomendó tu nutrióloga.

Todavía en este momento que son las 9:59am no he desayunado, me siento bien, no estoy ansiosa, aquí ya empiezan a comer papitas de la posada de ayer, y honestamente aun no tengo hambre, al rato iré a calentar mis rollos de jamón, cuando salga a las 3 y vaya a mi casa, tengo listo ya lechuga orejona y morada, y atún para comerme una rica ensalada que tanto me hará bien, y aunque tenga todavía sartenes llenos de tentación de guisos súper ricos, no caeré por que fue suficiente con la comida de ayer, y debo solamente disfrutar los días de fiestas, y los momentos con los buenos amigos y familiares.

No sé ustedes, pero yo nunca en mi vida había pensado o sentido esto, jamás y lo juro, hay algo en mí que dice nooo Celestina ya te la bañaste, estoy segura que la báscula seguirá peleada conmigo este viernes que vea a Liliana, pero no tengo miedo, me siento bien tranquila, esta semana sólo tengo un evento más que es mañana, entonces tengo el resto de la semana para seguirle en el proceso, y si tengo una cena o algo fuera de lo común, estaré atenta a no comer de más, ayer me serví concienzudamente y sintiéndome primero con mucho remordimiento, y luego me puse a contar lo que me comía hasta que dije fue suficiente, esto definitivamente es maravillosamente nuevo y gratificante. Sigo en esto, y aunque sea Navidad, y haya fechas de pura pachanga, no me defraudaré, tengo mis propósitos en mente y no los pierdo de vista, mi regreso a la realidad es cada vez más placentero.