Oficialmente estamos en Diciembre si señor!

Oficialmente empezamos diciembre, este mes todos ya queremos aventar el arpa como se dice, queremos ya salir de nuestros trabajos y movernos rápidamente a comprar cosas, regalos, comida, por las calles hay mil de acelere y muchas pachangas cada fin de semana. Aunque estemos en problemas financieros tendrémos la ilusión de estrenar algo, y de obsequiar cualquier cosilla, el pretexto es juntarnos, convivir y comer, y precisamente ayer, hablaba con mi mamá sobre eso, ¿qué vamos a cenar esta navidad? Bueno este año haré lasaña, posiblemente habrá tamales, pierna y pastel, pero creo que esta vez no será como otros años, que cenabamos lo de navidad, a la mañana siguiente desayunabamos lo que quedaba, a medio día haciamos tortas, y le seguiamos hasta el 26 de diciembre comiendo y comiendo. Yo recuerdo que en la cena de noche buena me servía 3 veces de todo, rebosando de comida, acompañada de cuernitos, muuucho vino tinto, y luego comí pastel, y del postre de bombones con crema y duraznos en almibar con nuez picada, pero solo por hoy la sensación de esa cena no me emociona.

Osea no sé sí me explique, que la emoción para mi era saber que ibamos a retacarnos de comida, a parte de los regalos OBVIO! jajajaj pero hoy tuve la certeza que no será importante para mí, evidentemente no llevaré una ensalada verde con atún, cenaré con mi familia lo que preparémos ese día, pero para mí ha pasado a otro término la comida.

Un ejemplo sobre ello, es la posada de mi trabajo, a veces me colaba con los jefes para ir a la degustación de platillos para la comida de la posada de mi facultad, pensando que así comería doble de lo que den! pueden creerlo! pues sí, luego cuando llegaba a la posada, trataba de llegar temprano para comer la botana, y no perderme de nada, de lo que hubiera en el menú yo me lo retacaba.

AAHH y los panes esos rellenos de queso philadelphia que tal eh! pues me los atascaba también, por que como en todo salón de eventos te sirven bien poquito, y en mi mente estaba, pues me lleno la panza con pan... Que triste pero lo admito, mi pensamiento tenía otras prioridades. Para mí el día de la posada de mi trabajo era una oportunidad por comer cosas de la calle.

Realmente me sorprende que esto poco a poco este cambiando mi mente, ya no planeo los fines de semana, pensando donde comer en la calle, o que es el pretexto perfecto para ir a comer o cenar mugrero, sino que deseo convivir con mi esposo, y comer en cualquier lugar, lo importante es convivir, platicar, y pasar un rato agradable, ahora puedo decir, que bonito restaurante, que buena variedad hay aquí, o que padre música tocan esos músicos, sin necesidad de que diga, en ese restaurante sirven unos tacos que no tienen madre, o si vamos al centro, es a huevito comer en las quesadillas ventura, jajaja ahora sí como la obra de Renán Moreno, en la zona donde ande trago!

Y por último, este diciembre, que oficialmente termino un ciclo un año más, me siento diferente, y creo que soy otra persona, alguien mejor, mucho más positiva, y con la convicción de que no tengo que planear mis días según las comidas y cenas navideñas, sino por las personas que me rodean y hacen de mi vida una vida llena de felicidad. Y viendo estas fotos digo, GRACIAS DIOS POR HABERME ABIERTO LOS OJOS! y como dice mi amiga Alejandra, no paro sigo sigo!! Feliz Semana!

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