lunes, noviembre 13, 2017

Lo hemos logrado: 36km


El viernes pasado recibí una grandiosa noticia, mi doctor de cabecera me dio mis últimos resultados de sangre, orina y corazón, y su cara no podía reflejar otra cosa más que asombro y felicidad, he logrado tener con él una amistad, antes me regañaba, me hablaba del sobrepeso y la obesidad, y sentía que ni quería consultarme, pero el viernes me dio uno a uno los resultados de todo, azúcar, colesterol, hígado, riñones, tiroides, y en todo estaba en los mejores niveles, me dijo, eres una quinceañera Celeste, inmediatamente salí y me puse a llorar, le hablé a mi esposo, y le dije, mi corazón esta listo, todo esta listo! no podía creerlo que después de un mes y medio hubiera podido mejorar más mis resultados clínicos, y que me dijera el Doctor, Celeste, absolutamente nada te impide que corras ese maratón, estás sana. Dios es tan grande!
Lo de ayer fue una verdadera hazaña, ayer fue la última carrera larga antes del maratón, y todos estábamos muy ansiosos, he encontrado en cada uno de mis compañeros a un guerrero, uno que lucha contra sí mismo, y que no teme al fracaso porque no es opción. Ayer logramos vencer al Gordo que tenemos encima, todos nos veíamos felices. Yo no pude dormir bien una noche antes, estaba muy nerviosa, tenía tantas preocupaciones, la Gorda mental quería convencerme que no estaba lista, que no era para tanto, que me iba a doler algo, por más que estuviera convencida siempre trata de traicionarme, nos pidieron 34 - 36 km, lo que aguantáramos, y ese número lo traje toda la semana en la cabeza.

Y aun así, el sábado estuve nerviosa, muy preocupada de la ropa, de mis tenis, la vaselina, lo que iba a comer, las medicinas para el dolor, me escribía con mis compañeros, todos igual, y finalmente ayer temprano nos deseamos todos suerte y empezó mi carrera, siempre con mi amigo Bernardo, cuando llegamos al kilómetro 10 nos dijo ya nomas nos faltan 26! y reímos del optimismo, íbamos a buen ritmo, concentrados, oyendo música, a veces platicando, porque ya nos da la respiración y la fuerza para ello, nos vamos echando porras, viendo a los compañeros pasar, nos topamos muchas veces y en todas era la misma pregunta, ¿Cuánto llevas? luego Eduardo preguntaba ¿quieres agua? todos cuidando unos de otros. Corrimos tanto, fuimos tan lejos, había tanta gente entrenando para el maratón, todos esbeltos, atléticos, delgados, pero nosotros nunca desistimos, portamos con orgullo la playera de BÁJATE GORDO, porque eso queremos, eso hacemos, por eso luchamos, no cabe duda que el entrenamiento físico es importante, pero el mental lo es más.

Cuando iba terminando le llamé a mi mamá, Mamá ya terminé! lo logré!!! un día antes me dijo, si fuera otro tiempo te diría, mija nomas lo que aguantes, pero no, me dijo, haz demostrado que puedes, no te pares tienes mi bendición, por eso le llamé, y para mi sorpresa estaba en fundidora, Dime dónde estás me dijo!, y corrí para ir a alcanzarla, fue maravilloso, le presenté orgullosa a mis compañeros, quería que los conociera a todos, pero sobre todo a David quien me invito al grupo, estaba tan feliz, los que llegaron primero, los que llegamos después no nos fuimos, esperamos al último, estuvimos ahí conversando sobre la carrera, sobre lo vencido, empezamos a comer, y escuche un MAMÁ!!!!!!!!!!! y venía mi china corriendo con mi esposo, nos abrazamos, mi marido me dijo VES! SI PODÍAS, cuánto hiciste?, no podía ser más feliz, que les puedo decir, Dios está en todas partes, y ayer estuvo con nosotros en nuestro recorrido, nos regaló un hermoso día, y una excelente compañía. 

Hoy estoy convencida que esa medalla esta casi en mis manos, que vencí el temor de los 21 km antes de las 3hrs que no sufrí para cumplir ese reto, ahora el maratón tiene muchos candados, sino pasas la barrera de los 21km antes de 3 horas y media estarás descalificado, pero para las 3 horas y media íbamos en casi 28 km, aún no encuentro esa pared de la que todos me hablan, y ahora que iré de bajada en el entrenamiento es cuando mejor haré mi dieta,  cuando mejor dormiré, cuando mejor soñaré ese recorrido, en menos de seis meses lograré cambiar mi vida para siempre, esa Gorda que vivió en mi, y que estaba trepada, esta por desaparecer, amo este deporte, y me siento tan feliz de decir, soy runner,  soy una más de bájate gordo, y saben qué? me siento orgullosa de serlo. Y como me dijo mi hermano, ve pensando que sigue!

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