viernes, noviembre 24, 2017

El poder está en ti



Voy a contarles como empezó todo, los que me leen ya lo saben pero creo que es importante resumirlo, en el 2014 hace ya 3 años, en septiembre pase momentos difíciles, y decidí salir a correr, quería correr de mi, es la verdad, quería desahogarme de tantas maneras, me decían que con mi peso no se podía, que con hipertensión era lo peor, pero no hice caso, lo quise hacer, y el 31 de diciembre de 2014 fue mi primer carrera, una chiquita de 5 kilómetros que dolieron como 20k, no estaba preparada, no tenía información, solo lo hacía porque quería hacerlo.

Entrené sola, sin preguntarle a nadie, solo me inscribía y lo hacia, comía a veces bien, a veces mal, pero no sé porque quería hacerlo, poco a poco empecé a retarme, bueno porque mejor no 10 km, porque no mejor hacer menos tiempo. Empecé un último día del año, porque no podía esperar a que fuera día 1ero de enero, porque no quería esperar a que fuera LUNES para empezar una dieta, no sé solo salí y lo hice, aun no sabía de rutinas, ni de tiempos, ni de tenis! pero lo hice. 

Empecé todo el 2015 a inscribirme en carreras, solo por que sí, a veces con más tiempo, a veces con menos, pero la conciencia de tener una inscripción me empezaba hacer comer menos, a querer salir más a "entrenar" pensaba, y así seguí, al principio me acompañaba mi familia, mi hija y mi esposo, pero nunca brinque a correr más kilómetros, me daba miedo, pensé que no podía, así transcurrió el año hasta que me pasó lo que me pasó, y perdí la fuerza, no quería correr por miedo a mi, por miedo a otra pérdida, y no sé lo deje ir.


Aun así corrí de nuevo la carrera del 31 de diciembre del 2015 pero con menos ganas, muy triste, pero seguí intentándolo, lo más difícil era dejarlo, no sé porqué pero seguí, poco a poco se me hizo costumbre hacerlo, pero lo dejaba, y regresaba, pues no había un cambio rápido, yo quería adelgazar, pero no había descubierto la magia de querer quitarte el peso no sólo físico sino el emocional que te hace regresar y caer.
Dejaron de acompañarme a las carreras, ya no me acompañaba mi familia, pues el entusiasmo mermo pues los resultados hicieron lo mismo. 
Todo el 2016 lo hice sola, no sé porque quería que fueran a verme correr, porque era lo mismo, a veces mayores retos a veces menos, pero seguía igual, mismo peso, mismo genio, misma indisciplina.

Yo quería y pedía a dios una señal, un sendero, un guía, pero no llegaba, no sabía donde buscarlo, y terminé el 2016 enojada, frustrada y con muchas ganas de hacer algo, de que las promesas se cumplieran pero la voluntad se quiebra y uno es cobarde, es la verdad...

Este año corrí menos, tenía más trabajo, otro empleo, pero tenía ganas, empecé en febrero a decir que si podía pero no tenía tiempo, el 2017 empezó con un viaje a Centro América, y miles de pretextos llegaron a mi, pero pues iba a correr con mis vecinas, no importaba la distancia ni el tiempo, pero quería seguir haciéndolo, el resto es historia. Hoy me encuentro a 16 días de correr un maratón, 42 kilómetros 195 metros, hoy me siento como nunca, más viva, más comprometida, como si estuviera en otra realidad, con una disciplina que nunca había tenido en nada, en ningún objetivo que haya tenido me había sentido tan entregada, hoy mi   madre me llama para decirme, estoy contando los días! hoy mi hija me dice mamá ya casi!!!! Y los nervios me llegan. Hoy siento que esta por llegar algo muy valioso, y quisiera poder compartirlo, poder decirles la emoción que se siente, quisiera contagiarlos, pero no sé como, sólo les digo que este 10 de diciembre me despido de todos, porque no creo volver a ser la misma persona, porque con fuerza y voluntad le di vuelta a la moneda, estoy a 16 días de decirle a dios a la gorda que vivió en mi por tanto tiempo y que no me dejaba vivir, y que les puedo decir, se siente maravilloso! Aprendí que si se quiere se puede! que el poder esta en ti y sólo en ti! Así que espero verlos en el trayecto! Vayan a verme y griten mucho!!!

lunes, noviembre 13, 2017

Lo hemos logrado: 36km


El viernes pasado recibí una grandiosa noticia, mi doctor de cabecera me dio mis últimos resultados de sangre, orina y corazón, y su cara no podía reflejar otra cosa más que asombro y felicidad, he logrado tener con él una amistad, antes me regañaba, me hablaba del sobrepeso y la obesidad, y sentía que ni quería consultarme, pero el viernes me dio uno a uno los resultados de todo, azúcar, colesterol, hígado, riñones, tiroides, y en todo estaba en los mejores niveles, me dijo, eres una quinceañera Celeste, inmediatamente salí y me puse a llorar, le hablé a mi esposo, y le dije, mi corazón esta listo, todo esta listo! no podía creerlo que después de un mes y medio hubiera podido mejorar más mis resultados clínicos, y que me dijera el Doctor, Celeste, absolutamente nada te impide que corras ese maratón, estás sana. Dios es tan grande!
Lo de ayer fue una verdadera hazaña, ayer fue la última carrera larga antes del maratón, y todos estábamos muy ansiosos, he encontrado en cada uno de mis compañeros a un guerrero, uno que lucha contra sí mismo, y que no teme al fracaso porque no es opción. Ayer logramos vencer al Gordo que tenemos encima, todos nos veíamos felices. Yo no pude dormir bien una noche antes, estaba muy nerviosa, tenía tantas preocupaciones, la Gorda mental quería convencerme que no estaba lista, que no era para tanto, que me iba a doler algo, por más que estuviera convencida siempre trata de traicionarme, nos pidieron 34 - 36 km, lo que aguantáramos, y ese número lo traje toda la semana en la cabeza.

Y aun así, el sábado estuve nerviosa, muy preocupada de la ropa, de mis tenis, la vaselina, lo que iba a comer, las medicinas para el dolor, me escribía con mis compañeros, todos igual, y finalmente ayer temprano nos deseamos todos suerte y empezó mi carrera, siempre con mi amigo Bernardo, cuando llegamos al kilómetro 10 nos dijo ya nomas nos faltan 26! y reímos del optimismo, íbamos a buen ritmo, concentrados, oyendo música, a veces platicando, porque ya nos da la respiración y la fuerza para ello, nos vamos echando porras, viendo a los compañeros pasar, nos topamos muchas veces y en todas era la misma pregunta, ¿Cuánto llevas? luego Eduardo preguntaba ¿quieres agua? todos cuidando unos de otros. Corrimos tanto, fuimos tan lejos, había tanta gente entrenando para el maratón, todos esbeltos, atléticos, delgados, pero nosotros nunca desistimos, portamos con orgullo la playera de BÁJATE GORDO, porque eso queremos, eso hacemos, por eso luchamos, no cabe duda que el entrenamiento físico es importante, pero el mental lo es más.

Cuando iba terminando le llamé a mi mamá, Mamá ya terminé! lo logré!!! un día antes me dijo, si fuera otro tiempo te diría, mija nomas lo que aguantes, pero no, me dijo, haz demostrado que puedes, no te pares tienes mi bendición, por eso le llamé, y para mi sorpresa estaba en fundidora, Dime dónde estás me dijo!, y corrí para ir a alcanzarla, fue maravilloso, le presenté orgullosa a mis compañeros, quería que los conociera a todos, pero sobre todo a David quien me invito al grupo, estaba tan feliz, los que llegaron primero, los que llegamos después no nos fuimos, esperamos al último, estuvimos ahí conversando sobre la carrera, sobre lo vencido, empezamos a comer, y escuche un MAMÁ!!!!!!!!!!! y venía mi china corriendo con mi esposo, nos abrazamos, mi marido me dijo VES! SI PODÍAS, cuánto hiciste?, no podía ser más feliz, que les puedo decir, Dios está en todas partes, y ayer estuvo con nosotros en nuestro recorrido, nos regaló un hermoso día, y una excelente compañía. 

Hoy estoy convencida que esa medalla esta casi en mis manos, que vencí el temor de los 21 km antes de las 3hrs que no sufrí para cumplir ese reto, ahora el maratón tiene muchos candados, sino pasas la barrera de los 21km antes de 3 horas y media estarás descalificado, pero para las 3 horas y media íbamos en casi 28 km, aún no encuentro esa pared de la que todos me hablan, y ahora que iré de bajada en el entrenamiento es cuando mejor haré mi dieta,  cuando mejor dormiré, cuando mejor soñaré ese recorrido, en menos de seis meses lograré cambiar mi vida para siempre, esa Gorda que vivió en mi, y que estaba trepada, esta por desaparecer, amo este deporte, y me siento tan feliz de decir, soy runner,  soy una más de bájate gordo, y saben qué? me siento orgullosa de serlo. Y como me dijo mi hermano, ve pensando que sigue!

jueves, noviembre 09, 2017

4 meses han pasado, y falta 1 mes para el maratón

No se como explicarles el cúmulo de emociones que están en mi pecho, es una sensación como de enamoramiento, tal vez, ese sería un ejemplo, de nervios y mariposas en la panza cuando se piensa en el ser amado, así me siento cada vez que veo el calendario, cada vez que veo los kilos y las medidas perdidas, cada vez que preparo mis cosas para salir a correr, cada vez que veo la fecha más cerca, cuando me preguntan del maratón, me emociono, no me la creo, me dan ganas de llorar, parezco adolescente.

Esta semana tuve la penúltima junta antes del maratón con el grupo Bájate Gordo, mis compañeros de calle, quienes padecen lo mismo, todos estabamos nerviosos, emocionados al escuchar al coach, nos tocabamos la cara, nos apretábamos los dedos! nos dimos palmadas de aliento, con tantas dudas, todos mirando con grandes ojos, con tantos nervios, explicándonos el Coach sobre los tiempos, la técnica, y dándonos consejos... Fue un encuentro muy emocionante. Este domingo es nuestro último ensayo antes del maratón, 34-36 kilómetros es la meta, lo que el cuerpo aguante, lo que hayamos entrenado todo el año, unos meses se resumen a este domingo, preparar esta semana como si ya fuera el maratón, dormir mucho, comer más, tomar mucha agua, preparar la ropa, la misma con la que se correrá el 10 de diciembre... ya cuento los días para este domingo.

Mientras tanto, ayer mi hija me hizo llorar, pidiéndome una chingada trompeta camino a la escuela, y pensé que voy hacer con una trompeta en mi casa sonando todas las tardes, ni de pedo le dije que NO, pero la quería para echarme porras, para acompañarme en mi travesía, y lloré! luego en la tarde vimos fotos de hace unos años, de hace unos meses, y me dice, mamá tengo otra mamá muy diferente, y volví a llorar, platicamos de lo que siento cuando corro, y de que me siento libre, que pienso en ella, que pienso en todo y que hablo con Dios, y me dice mamá pues en el maratón vas a poder hablar con él un chorro!



Y la verdad le doy gracias a él porque no hay quien me pare, ni la lluvia ni el frío, ni la hueva, ni la GORDA, doy gracias a dios porque estuve a punto de caer, de perderme, de seguir comiendo mal, de seguir viviendo a medias, de pensar que sentirse así era NORMAL, que perder 2 embarazos, tener un conato de infarto, ser hipertensa, ser prediabética, tener gastritis, y tantos y tantos achaques era vivir NORMAL, le doy gracias a dios por darme lo que necesitaba en el momento exacto, y que hablar con David el día de la graduación de kinder de mi hija, no fue casualidad, fue Dios que me lo estaba diciendo en la cara, que por medio de él me invito al grupo y que pude leer la señal, ahora me veo y no me reconozco, en ningún sentido, me siento tan Feliz, es un reto que debería hacer muchos, el encontrarse al límite y conocerse en el trayecto.

Hoy 4 meses atrás, no soy la misma persona, y cuando logre cruzar esa meta con la que me levanto y con la que me acuesto todos los días, sé que no volveré a ser la misma, sería un error dejarlo, sería una tonta si regreso a mi sillón, a contemplar como me pasa la vida, en vez de vivirla. Así que la cuenta regresiva esta tic tac tic tac... 31 días para convertirme en maratonista, ni en 20 años lo hubiera imaginado, jamás lo hubiera creído si me lo hubieran dicho, y ahora estoy por cambiar toda mi perspectiva de vida, así que ahí voy a donde mis pies me lleven y hasta donde mi mente aguante!

Aprendiendo otra vez..

  En estos días he aprendido mucho, primero, que ir al gim es menos pesado de lo que pensaba, porque salgo de mi casa tranquila, sin tener q...