90 días de cambiar mi vida: La experiencia de Bájate Gordo

Han pasado 90 días ya, desde que inicie con el programa de Bájate Gordo, si alguien me hubiera dicho lo que iba a lograr en tan pocos días yo no lo hubiera creído. Desde que conocí la historia de mi ahora gran compañero de rutina el papá de una amiguita de mi hija, y quien me permitió conocer su historia y adentrarme en el grupo, he logrado esto, ha sido un camino literal lleno de bendiciones y de grandes satisfacciones. El camino no ha sido fácil, el coach dijo "no doy pastillas, no hago milagros, todo esta en ti y solamente en ti", hijole, fue todo cierto, a medida del esfuerzo, a medida de los resultados.

Somos un grupo, porque ahora me considero parte del grupo, a pesar de que todos empezaron desde muchos meses atrás, yo pude alcanzarlos, Hace dos años que Dios me dio la iniciativa y me inicié en esto de correr, y era porque tenia destinado estar con ellos, sino lo hubiera echo por mi cuenta, no hubiera podido llegar hasta donde me encuentro. Todo llega cuando tiene que llegar, y este plan me llego literalmente hasta el corazón. 3 pastillas diarias para la hipertensión, que ya no necesito, un corazón con una extrasistoles ventricular que  ya no padezco. Yo no voy a decirles que ya estoy curada, porque no es

así, nunca lo estaré, porque ser Gorda es un condición que sino se ataca todos los días, terminará por vencerte, sino luchas contra la Gorda mental va a terminar por vencerte, es poderosa, mala consejera, y tiene un poder sobre nosotros que parece invencible, a mi me funcionó correr, me hace tan feliz, me llena de alegría, lucho con mi mente cada km, es una pelea por dominar el cuerpo, pero cuando termino una meta, me siento poderosa y plena.

Cada reto cuenta, y sigo al pie de la letra cada instrucción, a veces veo kilos menos, a veces veo centímetros menos, pero lo que si veo a diario son las ganas de no romper la dieta, no perder el control, hacer lo que me toca hacer, ir a entrenar, no auto compadecerme, auto premiarme, y sobre todo ser honesta y clara conmigo, lo que se ve en el espejo no es ESTAR SUPER FLACA, es estar MENOS GORDA, porque para estar en mi peso falta muchísimo, pero si lo dejo, si considero que ya estoy bien, nunca voy a llegar, y voy a regresar a donde estaba, QUE LES QUEDE CLARO, siempre hay que estar en guardia, porque la guerra nunca se acaba, quien me lea y sufra de obesidad me va a entender perfectamente!!!!!!!! 

Este ciclo nunca va a terminar si bajamos la guardia, si nos dejamos ir, sinos damos un permiso, luego serán dos, luego tres y para cuando queramos ya estaremos de vuelta, porque ya sabemos lo bien que se siente que te digan WOW que flaco te ves!!!! y empiezas a creértela, pero la realidad es que nunca vas a estar flaco si es tu obsesión estarlo, aquí la delgadez no es crucial, sino cambiar el chip mental de que lo que te comes te da salud o te la va a quitar.

Dios ha sido muy bueno conmigo porque me permite hacer esta locura de querer correr a mis 39 años 42 kilómetros, y en el camino he conocido historias maravillosas de personas que cambiaron su vida para siempre, pero también historias de terror, esas que salen de repente para decirme, no ten cuidado, las rodillas, los tobillos, el amigo de un amigo le dio un infarto cuando aumento los kilómetros, oye es que aun tienes mucho peso, y tantas que se han cruzado en mi camino.

Cuando corro mucho, más de 20 kilómetros, ni me la creo, me dan ganas de llorar y de ser grosera, siii de decir groserías! como ME LA PELAN!!! jajajaja porque no lo puedo creer, porque se siente increíble, al día siguiente cuando no puedo pararme de la cama, subir escaleras, cuando me duele todo, digo, es la huella de la batalla, porque este dolor me encanta, y no el dolor del pecho que tenía hace dos años, no el dolor

de la gastritis, no el dolor de la espalda por el sobrepeso, por ser obesa, ahora estas dolencias son grandiosas, porque sabes que es porque TE COSTO!, porque lo lograste, y si si duele, pero vale la pena!

Ahora estoy a 90 días de haber empezado este reto, y estoy a menos 9 semanas de correr esos 42km que me hacen despertarme con ellos y acostarme con ellos, no voy a lograr correrlos sino sigo con el plan, sino sigo con el apoyo de mi Familia, de mi esposo e hija que sacrifican sus tiempos, sus salidas, y mi compañía por dejarlos para después, por dejarlos para entrenar, por dejar mis deberes por la pista, y si, he cambiado mucho, me siento otra persona, ya me di cuenta de que los antojos, de que los atasques de comida, las trampas y los "premios" son solo porque la GORDA dominaba y que realmente no necesitaba nada de eso, no es necesario, y escucho a mi cuerpo, que cada vez lo oigo más claro y más cerca, porque ya esta cada vez más cerca! 90 días de ser Bájate Gordo, gracias familia, gracias amigos, gracias a quien me ha acompañado en la pista, en la calle, a quien me dice NO PARES Y SIGUE ADELANTE!