Todo tiene un ciclo y todo tiene un porque... en el 2017 llegué al club de corredores Bájate Gordo sin ninguna fe en mi, con una completa inseguridad de lo que podía lograr, hoy reconozco que las dos cosas más dificiles que he hecho en los últimos diez años, fue atraverme a correr un primer maratón y después intentarlo otra vez. Durante todo este trayecto he tenido altas y bajas, constancia e indisciplina, pero siempre estan ahí para apoyarte y para escucharte, no tengo más que decirles Gracias por todo el aprendizaje, por las palabras de cariño, por el gran compañerismo y sobre todo por hacerme creer que lo imposible se puede vencer.
Sin duda, mi relación con la comida es un problema de vida, lo único que me mantiene y que me tiene en pie de lucha, son mis tenis y mi terquedad de seguir entrenando, pero la comida es un problema serio para mi. La motivación la tengo pero sin embargo creo que necesito otro reto, un siguiente escalón que me permita ser más estricta, más disciplinada y sobre todo con mucha mayor concentración de mi parte.
Sin más, deje el grupo de Bájate Gordo con mucha tristeza, fue una decisión muy difícil que consulte varias veces con la almohada, dolió y mucho, hice grandes amigos ahí, compañeros tremendos que me dieron oportunidad de conocer sus historias y de ver milagros en ellos, eso jamás lo olvidaré, en verdad Gracias a cada uno de ellos, principalmente a David que fue quien me encamino a este grupo, a Sergio por recibirme y a Hugo por convertirse en mi héroe de tantas formas. Los llevo siempre conmigo. Un día de esos que ando entrenando sola me tope con un equipo se llama CUMPLIENDO SUEÑOS; todos delgados.. en su mayoría, pero de igual manera me acerque a verlos, pero seguí mi camino, tengo semanas que los veo en el mismo lugar, y muy tarde por la noche, eso me animo acercarme a preguntarles quienes eran y que hacian. Bueno el final es ese, estoy en un nuevo equipo, con una entrenadora que esta al pendiente de mi, y que bueno esta es mi semana 0, tengo desde este fin de semana pensando en el maratón de diciembre 2020.
El año pasado corrí mal, no entrené lo suficiente, deje que la flojera, el estar solita en el trayecto y que el trabajo me venciera y rendí mal, no importa que haya tenido mala racha con el incidente durante el maratón, baje el ritmo e hice muchisimo tiempo. Eso me pegó durisimo en el ego, y en lo que estaba haciendo, engañandome tal vez, o compadeciendome de nuevo, y esa sensación no me gustó, me enfadó y me deprimí mucho, deje que la comida me aliviara y heme aquí con 10 kilos de más que el año pasado en estos mismos meses, cómo es posible, simplemente NO me ha costado tanto pero tanto cambiar todo, cambiar mi rutina, mis salidas, mis amigos, TODO ABSOLUTAMENTE TODO; como para hacerlo a medias, o dejarlo caer a mitad de semana, gastar en comida sana para gastar de nuevo en comida de la calle el fin de semana. Simplemente NO.
Domingo 23 de Febrero empecé nueva dieta, con un Nutriologo que se hace llamar INSANO, ok si me da temor, pero bueno la cifra que me dió de meta me tiene aterrada, pero decir que en Agosto todo estará mejor para mi tercer maratón, me tiene contenta, enfocada y como todo en esta vida, Día a Día, con Don Chuy de la mano... me dijo no es agradable, no será fácil, sé que dolera, sé que me costará muchisimo, sé que otra vez estoy con lo mismo, pero esta lucha es y será por siempre.... Mañana será oficialmente mi bienvenida al equipo, no sé que me espera, pero estoy ansiosa por saber que logaré!
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